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"Me arruinaron la vida": la primera 'trans' arrepentida que reclama a la Sanidad pública por haberla operado

La mayoría de niños con disforia de género, lo superan al llegar a la adultez, pero estos jovenes no tuvieron la información suficiente, sino una agenda ideológica que realmente no pensaron en ellos.



Esto se suma al caso de Reino UnidoKeira Bell, también inició una demanda al gobierno y ganó por llevarla a transicionar. La Justicia decidió allí, que a los 15 años, Bell no tenía madurez suficiente para tomar una decisión así.

Y en este artículo, no estamos tratando los muchísimos casos de personas adultas, que se arrepienten del cambio y denuncian este infame sistema, sino de niños y adolescentes a merced de la locura ideológica de quienes gobiernan, pensando en ciertos lobbys minoritarios de poder concentrado.

En un artículo viral del medio "El Mundo", relata el calvario de una joven en España, que le hicieron un cambio de sexo y ahora se arrepiente y demanda al estado. 

En 2020, Susana Domínguez, buscó al psicólogo que seis años antes, en 2014, le había dado luz verde a su tratamiento de cambio de sexo, y había permitido que más tarde la sanidad pública de España le extirpara el útero. 



Según se explica en el artículo: "Ella no era un chico en cuerpo de chica, como le había dicho el psicólogo pro LGBT, cuando sólo tenía 15 años. Las hormonas y las operaciones habían sido una tremenda equivocación. Susana había tardado seis años en darse cuenta de que quizás sus problemas mentales, que incluían depresión y trastorno esquizoide, la habían incapacitado para tomar la decisión correcta".

Ella era y siempre había sido una mujer, pero una mujer con serios trastornos que nada tenían que ver con la transexualidad

En el transcurso de 6 años, a Susana le mutilaron sus pechos y su útero, algo irreversible, y la hormonización masculina fue feroz

Con intentos de suicidios, a Susana se le encontró en otras terapias, rasgos de un trastorno del espectro autista que ese primer profesional nunca advirtió.

En 2020 Susana, aterrada por el error cometido y sumida en sus problemas mentales, le echó en cara todo esto a este profesional. 

«No sólo eso. También fui a la primera psiquiatra, la que me remitió al psicólogo, dando por bueno que yo era trans. Yo tenía 15 años. ¿Cómo me dejaron hacer eso? ¿Cómo podía estar segura de lo que quería?», sostuvo Susana.

Susana ya no tiene aparato reproductor, ni femenino ni masculino. Lleva años tomando hormonas masculinas, y ahora deberá tomarlas femeninas para regresar, en la medida de lo posible, a su ser original. Los daños son prácticamente irreversibles.

Reuniendo todas las fuerzas de que son capaces, después de tres años abrumadas por el error cometido y sin una perspectiva científica de solución, Susana Domínguez y su familia han interpuesto ahora una reclamación contra el Servicio Gallego de Salud

En concreto, denuncian un diagnóstico incorrecto de disforia de género.

«Ninguna ley autonómica, ni la que se acaba de aprobar, contempla qué hacer en estos casos». «Y la reciente Ley Trans , aprovada en España, prohíbe terminantemente cualquier abordaje psicológico que no sea afirmativo, con penas de multa de hasta 150000 euros. Incluso un enfoque no afirmativo de los padres puede hacerles perder la patria potestad».


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