PSOE y Podemos acuerdan penas de cárcel para quien de forma individual intente convencer a una mujer para que no aborte

Según informa el diario ABC, los partidos que conforman la coalición social-comunista que gobierna España, han acordado una enmienda al proyecto de ley que busca criminalizar la actividad provida cerca de las clínicas abortistas. 

Las penas de cárcel se aplicarán no solo a quienes formen parte de grupos organizados sino a personas que actúen de forma individual.

A través de una emmienda conjunta a la proposición de ley del PSOE, a la que ha tenido acceso ABC, ambos grupos piden ahora que las penas de tres meses a un año de cárcel no se apliquen solo a grupos organizados que informan y ofrecen ayudas a las mujeres a las puertas de estas clínicas si no también a cualquier persona que de forma individual «acose a una mujer mediante actos molestos, ofensivos, intimidatorios o coactivos que menoscaben su libertad».

En la proposición original presentada el pasado 12 de mayo, el grupo socialista planteaba que las penas de prisión o los trabajos en beneficio de la comunidad se establecieran como castigo para «el que hostigue o coarte la libertad de una mujer» que pretenda abortar «promoviendo, favoreciendo, o participando en concentraciones en las proximidades de lugares habilitados para interrumpir embarazos».

Ahora bastará que alguien actúe de forma individual para ser considerado un delicuente.

La presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, Alicia Latorre, explica a ABC que esta enmienda de PSOE-Podemos «parece una respuesta furiosa y llena de odio» a «la gran manifestación pública», que tuvo lugar el pasado domingo en la Puerta de Alcalá de Madrid y al resurgimiento del movimiento provida. «Por mucho que quieran, a golpe de ley injusta y sin sentido, invertir la carga de la prueba, por mucho que quieran presentar el mal como bien, los delitos como derechos, no podrán cambiar la realidad de que el aborto es matar, que se trata de un muy lucrativo negocio económico e ideológico, y que no les importan las mujeres y mucho menos sus hijos», afirmó Latorre.