El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro , visita una pequeña iglesia de las asambleas de Dios

 Bolsonaro protagonizó una escena sin precedentes . un presidente en ejercicio detuvo a su séquito frente a una pequeña iglesia, ingresó y participó en la celebración del culto.

Pasaba por allí con motivo de una visita a uno de los barrios más humildes del Distrito Federal, para comprobar las dificultades económicas que enfrentan las personas debido a la pandemia.

El mandatario le agradeció su receptividad y fue advertido de una liberación divina que Dios le dio ante la adversidad política.

Los más pobres se están desesperando cada vez más, no tienen nada para comer. El efecto colateral de este tipo de lucha contra el virus ha sido realmente devastador ”, comentó Bolsonaro cuando se le dio la oportunidad de hablar con los fieles.

En la visita al barrio Morro da Cruz, en São Sebastião (DF), el presidente ingresó a la casa donde se alojan los venezolanos, y reiteró que “Brasil no se convertirá en Venezuela”, agregando que las Fuerzas Armadas están del lado de los brasileños.

“Amamos a los venezolanos.  Estás viviendo una experiencia de lo que es la dictadura con esta política de 'quedarte en casa', 'toque de queda', 'no puedes ir a la playa', no puedes hacer otra cosa. No es para salvarte. Es una política para sofocar la economía y acabar con Brasil para siempre ”, agregó Bolsonaro.

A sus opositores, que muchas veces lo llaman “dictador”, les dijo que son parte del grupo ideológico que apoya al régimen de Nicolás Maduro: “No hubo un momento para que yo salga de las cuatro líneas de la Constitución. Los que me acusan huyen. Vienen de Venezuela para aqui, pero nadie va de Brasil a Venezuela ”